Podemos vivir sin hacer "metafísica" y ser felices, pero entonces vivimos amparados en el "sentido común". Una manaera de conocer la vida sencilla del hombre justo. El bien y el mal se presentan a sus ojos y eligiendo habitualmente el bien (lo que es una gracia de Dios) se le hace connatural lo bueno. El ser "bueno" hace ver el mundo "con los ojos de Dios".
En ese estado de "felicidad" la metafísica como disciplina "quizá no sería tan acuciante", pero esa felicidad no se da en la tierra. Los enemigos de Dios sembraron la cizaña y, con la cizaña, la duda, la angustia, la maldad... Y ahí están diciendo ¿Cómo es que Dios permite todo esto? El "mal" requiere una respuesta metafísica y más cuando el mal toca el alma y la vida de los que uno ama.
Así, en el "mundo real" hay dudas, caminos falsos, caminos dudosos, personas que siembran dudas. Hay cizaña y trigo que se seca. Ante esas realidades, los que tienen más capacidad, los "intelectuales", tienen la obligación de ser luz, de ser guías. Por una parte en la Iglesia esa labor la hacen los "pastores", pero para toda la humanidad, los intelectuales deben aportar su conocimiento para orientar a las personas en un mundo de sombras.
Ahí un médico debe buscar la razón última de su obrar, sobre todo en las situaciones límites donde le bombardea la cizaña: la biomedicina, los cuidados paliativos, la investigación biiomédica... un médico cristiano tiene aún más obligación de formarse en esos aspectos de la ética, que es una parte de la metafísica. Debe fundamentar muy bien los valores de la vida humana y además de un modo racional, para todos los hombres, creyentes o no creyentes.
Mi profesión, de Ingeniero, es algo diferente. Difícilmente me topo con una obra civil con problemas éticos. Pero sí con la corrupción, con los "contratos ilícitos", y ahí el recurso a la ética tambié es importante. No nos podemos enriquecer manchando nuestra conciencia. Y debe uno argumentar que "no todo vale", el "utilitarismo" debe desmontarse intelectualmente. Y, mira por donde, es útil la filosofía. El acto bueno y recto orientado al bien, hecho con buena intención.
Supongo que cada persona, si "es un intelectual" se pregunta con más y más profundidad las razones de su pensar y obrar y no le basta el "porque sí". Esa profundización, en mi opinión, justifica el estudio de la Metafísica.
frid
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